Navegamos el sueño



Navegamos el sueño
montados en esta balsa
que son nuestros dos cuerpos abrazados
subimos y bajamos por montañas acuáticas,
a la deriva vamos seguidos por miriadas
de peces luminosos.
Dejamos atrás la silenciosa varazón
de ballenas suicidas en la noche
y con ternura zozobramos.
Una luna arriba y otra abajo nos persiguen
y nosotros ingrávidos flotamos
entre estos dos espejos temblorosos.
Nos dejamos llevar,
Nos alejamos del litoral repleto de arrecifes
como fantasmas blancos ellos, nosotros
como blancos fantasmas
deslizándose en este silencio que es la noche
en esta noche que es un silencio de agua,
yo soy tú, tú eres yo, somos nosotros
indisolubles, anclados uno al otro
con estos cuatro brazos que se abrazan
rodeamos algún arrecife solitario
que como sombra pasa
¿Qué llevamos por vela si estamos desnudos
ante este mundo mágico?
¿Qué cabo puede atarnos a la vida si juntos decidimos
arrojarnos al mar de madrugada
y hoy es noche, ya noche y proseguimos
en esta misma aventura enamorada…

1 comentarios:

FRANCISCO PINZÓN BEDOYA 23 de agosto de 2009, 14:35  

Sigo opinando. Me gustan... porque tienen mucha fuerza... pero ¿por qué anónimos? No lo entiendo, a menos que sea como un experimento que un famoso poeta hizo en BLOGSPOT, hace ya un tiempo y se hizo llamar: Camille Stein (leí una entrevista en que lo confesaba y sobre todo lo que había aprendido de la red)

Un saludo desde Medellín

También puedes ver mi blog "El Terreno de la Loma" en: http://elterrenodelaloma.blogspot.com/



En el espacio interior de cada quien, hay un animal que sueña...